Habitación 714. Detrás de esta puerta se encontraba David.
Cerré los ojos, respiré hondo y abrí la puerta...Hay estaba David, en unas
condiciones pésimas...Al verme entrar, David intentó incorporarse para hablar
conmigo, pero su intento fue inútil...El dolor de la herida era muy fuerte y no
podía realizar esfuerzos. Decidí acercarme a él para hablar....
-Kayla, ¿Qué haces aquí? pensé que después de lo que pasó no
querrías saber nada de mi....Dijo él.
-No he dejado de apoyarte ni un solo momento David...Susana
y yo llevamos horas esperando para poder verte...Solo podíamos entrar una de
las dos y ella ha decidido que lo mejor era que entrara yo. Necesitaba verte
David....Susana me ha dicho que ella estaba al tanto de todo lo referente a tu
huida...que nunca me dejaste de querer y que le hiciste prometer que siempre cuidaría
de mi....pero, porque volviste? Necesito saberlo...
-Kayla, ya sé que hice mal en irme, en alejarme de ti...Pero
ya sabes que los médicos no me daban ninguna esperanza de vida y no quería que
me vieras agonizar en mis últimos días...Susana me ha tenido al tanto de todo
lo referente a ti... Si decidí volver es porque recibí una llamada muy
importante que hizo que mi vida diera un giro completo...
-¿Y de quién era esa llamada?...Pregunte intrigada.
-De mi médico. Unos días antes de irme, decidió hacerme unas
pruebas para seguir la evolución del cáncer y para su asombro, se dio cuenta de
que había una posibilidad de vencerlo! Al principio no me lo creía...pero sí,
es cierto, la vida me estaba dando una segunda oportunidad...
Por eso, al recibir esa noticia, decidí volver...decidí
regresar a tu lado y vivir la vida que siempre hemos querido tener....Primero decidí
quedar con Susana, para contarle la maravillosa noticia y después, ir a
buscarte para contártelo todo. Por eso nos abrazamos...
-Eso quiere decir que...que podremos estar juntos!...Dije
llena de alegría
-Si Kayla. Por fin podremos ser felices...Me gustaría irme
lejos, muy lejos de aquí...quiero recorrer el mundo pero por desgracia, eso va
a ser imposible...
En ese momento entro la enfermera la cual me dijo que debía
salir de la habitación ya que David estaba muy delicado y necesitaba descansar.
Intenté quedarme en la habitación pero David insistió en que me fuera a casa a
descansar...
-Mañana estaré aquí a primera hora David...Mañana y todos
los días que haga falta mi amor...y me despedí con un beso.
Al salir de la habitación, me esperaba Susana. Estaba
intrigada por saber lo que había hablado con David...
-Lo siento Susana. Siento haberme puesto así. No sé cómo
pude pensar que entre David y tú había algo...Una vez más, te doy las gracias
por ser mi amiga y apoyarnos a los dos...
-No me pidas perdón... Cualquiera en tu lugar habría pensado
así si no hubiera estado al tanto de todo. Ahora tenemos que cuidar y apoyar a
David en todo para que se recupere lo antes posible y salga de aquí cuanto
antes...
Ya de noche, llegué a mi casa...Tenía muchas ganas de
tumbarme en la cama y descansar...Tumbada en la cama, empecé a pensar en las
palabras de David...Ya sabía que su deseo era recorrer el mundo los dos juntos
y yo podría hacer que ese sueño se hiciera realidad, por lo que decidí ponerme
manos a la obra... Cogí mi portátil y empecé a buscar hoteles, billetes de
avión...todo lo necesario para pasar el mejor mes de nuestras vidas...o mejor
dicho, de nuestra nueva vida.
A la mañana siguiente, tal y como le prometí a David, acudí
al hospital lo más pronto posible...Estaba radiante ya que todo se había
solucionado y estaba a punto de darle la gran sorpresa de su vida...nada podía
salir mal...
Llegue a la puerta de la habitación y me sorprendí porque la
puerta estaba abierta...por lo que decidí entrar. Al entrar, vi que su cama
estaba vacía...empecé a buscarle por los pasillos asustada, pensando que a lo
mejor lo habían pasado a otra habitación...David, David, David...Nada. No había
rastro de el...
En ese momento, la enfermera que estaba ayer en su habitación
se acercó a mí y me pregunto...
-Señorita, ¿Qué hace usted aquí?
-Vengo a ver al señor David, pero he ido a su habitación y
no estaba... ¿usted sabe algo?
-David ya no se encuentra allí... Dijo ella
-Entonces dígame en que habitación se encuentra, necesito
verle...
-El señor David no se encuentra ni en su habitación ni en
ninguna de este hospital...El señor David ha fallecido...
-¡QUE! ¡NO PUEDE SER!...El...El me dijo que todo iba a salir
bien...que estaba bien...no, no puede ser!...
-Ayer por la noche, sufrió una parada cardiorrespiratoria...Hicieron
todo lo que estuvo en su mano pero...no se puedo hacer nada por su vida...Lo
siento señorita.
No, no podía creer lo que me dijo... Me prometió que todo
esto había acabado, que por fin podríamos estar juntos...El destino ha jugado
en nuestra contra....No puedo creer que se haya ido, lo hecho tanto de menos....
¿Qué voy a hacer ahora? Teníamos un viaje que emprender juntos...una nueva vida
junto a él...
Desolada por el dolor, decidí llamar a Susana para darle la
noticia...Decidí quedar con ella en el acantilado, el lugar más adecuado para
hablar de David...Al darle la noticia, no pudo
parar de llorar...En ese momento cogí fuerzas y le dije:
-Susana. Ayer compré dos billetes de avión para empezar una
nueva vida junto a David...Era su sueño y quería que se hubiera hecho
realidad...Estoy segura de que le gustaría que vinieras conmigo...Emprendamos
este viaje juntas! Por él y por nosotras...Cumplamos su voluntad...una nueva
vida las dos juntas.... ¿Qué me dices?
-No sé qué decir Kayla. Claro que me gustaría irme lejos y
empezar de cero, aunque solo fuera por un tiempo...
-Entonces... ¿Eso es un sí? Pregunte...
-¡SI, ACEPTO! ....
Hoy hace 15 años desde aquel 17 de diciembre. Ese día que marcó
un antes y un después en mi vida…Durante mi viaje con Susana, conocí al que
ahora es mi marido, Kevin. Pensé que después de un primer amor, nunca volvería
a amar a alguien hasta que encontré a mi alma gemela, con el cual he tenido un
hijo maravilloso llamado Bryan. Mi marido siempre ha estado al tanto de todo lo
que me paso con David...Sabe que el primer amor es único e irremplazable…Sigo
amando a David y seguiré amándole ahora y siempre. Desde que se fue, cada 17 de
diciembre, acudo al acantilado junto al libro que me regalo…Ese libro que hace
que vuelva a revivir todo lo que he vivido junto a él en ese mágico lugar, el
lugar donde comenzó todo….
